jueves, 11 de junio de 2009

¿Quién dijo que el "vinotinto" es bueno?


- “Otra vez la misma historia!!, nos ponemos en ventaja y nos empatan, por méritos del rival o por errores nuestros, no logramos aguantar el score a favor ni siquiera 5 minutos, encima se les ocurre empatar en medio de la gresca entre los hinchas venezolanos y los maravillosos encargados de llevar la transmisión, todo mal!”
- “Tampoco es tan así, vos todo ves mal, al menos intenta mirarle el lado positivo che!, caramba!, fuimos testigos de un hecho histórico, Pastorino relató un gol, para ellos, pero gol al fin, tampoco es todo tan malo bo, el muchacho tiene futuro como relator”.
Esa parece ser la charla del día de la fecha, es que Uruguay empató en Puerto Ordaz contra Venezuela 2 a 2, Romano y Sczelza (encargados de la transmisión para la televisión uruguaya) tuvieron tremendo lío al gritar el segundo gol uruguayo, pero el gol de Rey (relatado por un vestuarista de la transmisión) en la replica, sentencia el empate que por ahora, esta dejando afuera del mundial a la celeste.
Muchos sostienen que Venezuela no tiene espíritu ganador, y que sus mayores alegrías se basan en efímeros resultados y no en títulos obtenidos, que el fútbol esta en tercer plano en el país de Chávez, quizás todo eso es cierto, pero también es verdad que la vinotinto nos emborracha demasiado, y en los últimos tiempos, nos ha amargado la fiesta, y ésta vez no fue la excepción.
Si la fecha pasada nos hundió, ésta se encargó de cubrirnos el cuerpo y dejar a medio cerrar el cajón. La celeste debía ganar y no lo realizó, regalo un tiempo entero y cuando se puso en ventaja por vez primera en el marcador en la segunda parte del partido, no supo aguantar la ventaja, así parece ser éste Uruguay.
A los 12 minutos de partido Venezuela encontró la primera ventaja por intermedio de Maldonado, nuestros compatriotas, con poco fútbol, pero con muchas ganas, salieron en busca del empate que llegaría recién en la segunda mitad. Tabárez manda a la cancha a Cristián Rodríguez, afuera Fernández, de floja participación. El “cebolla” sería determinante, ya que jugó e hizo jugar a sus compañeros. Asistió de manera notable a Suárez para que la mandara a las piolas, teniendo directa incidencia en el cambio del partido.
Adentro Abreu, afuera Suárez. El juego se daba por arriba, Uruguay precisaba un gol para respirar otro aire, y el DT, apostaba a la jerarquía del “loco”. Éste se la deja en bandeja a Forlán, que con el arco de frente, grita gol, 1 – 2.
Todo un país se ilusionaba con la victoria celeste, victoria que lo dejaba quinto en la tabla en coproducción con Ecuador (ya que venció a Argentina a primera hora 2 a 0), pero lo inesperado llegó (y también la hecatombe), tiro libre a 20 metros de distancia del arco defendido por Castillo, Rey ejecutó, nuestro arquero paró mal la barrera, llegó tarde, a dormir, 2 a 2, en la medianoche uruguaya.
La celeste, con estas dos últimas presentaciones queda sumamente complicada, debe ganarle a Perú en Lima en septiembre y esperar que pasa con Ecuador vs. Colombia (en Bogotá) para ver si recuperamos la quinta plaza e ir a la repesca con el cuarto de la CONCACAF.
El camino de Uruguay en la recta final no parece sencillo, debe visitar a Perú, recibir a Colombia (que quedó a una unidad nuestra al igual que Venezuela), ir a Ecuador (hoy esta dos puntos por encima de la celeste) para finalizar en el Centenario contra Argentina.
Sólo nosotros sabemos de victorias rutilantes y epopeyas inéditas, y en estas últimas fechas, nos jugamos la vida (a no ser que juguemos siempre con Venezuela).

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